La robótica industrial junto con la  automatización se ha convertido en la base de la consolidación de la Industria 4.0, aportando un binomio de numerosos beneficios para el rendimiento y eficiencia de cara a las cadenas productivas.

La robótica industrial es un campo de la ingeniería que se ocupa de la definición, diseño, desarrollo y fabricación de robots industriales que automatizan el trabajo de las personas, es decir, ejecutan sus movimientos en una cadena de fabricación o producción industrial y realizan sus tareas de manera más rápida, precisa, sin descanso y evitando el peligro para las personas.

Los robots están enfocados a realizar tareas reiterativas y peligrosas con mucha mayor precisión de lo que lo harían las personas, consiguiendo mayor calidad en la fabricación o producción evitando accidentes laborales. Al tratarse de máquinas que trabajan sin descanso producen en mayor cantidad y con menos coste, por lo que el aumento de la productividad es exponencial.  

Componentes de un robot industrial

Un robot industrial está formado por tres componentes básicos:

• Mecánica: Parte esencial para la precisión, la velocidad y la carga útil del robot.
• Electrónica: Permite que el sistema controle los motores y obtenga la información sobre su entorno mediante sensórica.
• Programación: Es la colaboración con el entorno del robot y el usuario.

Tipos de automatización para la robótica industrial

Según las necesidades y demandas de cada industria y su modelo de producción, los tipos de automatización pueden variar, diferenciándose en tres modelos:

A – Fija 

Este tipo de sistema automatizado es la opción recomendable en procesos con piezas idénticamente fabricadas. Pues no permite personalización, sino que produce lo mismo a grandes volúmenes. Es decir, el robot está programado para realizar una tarea de forma consecutiva, para producciones en masa y a gran escala. De esta manera, se pueden realizar tareas repetitivas sin perder precisión.

B – Programable

Está diseñado para controlar en tiempo real y en ambiente industrial, procesos secuenciales. Se basa en un sistema programable, es decir, se puede reprogramar el software que aloja el robot permitiendo reconfigurar y realizar diversas tareas. Este proceso es muy útil en producciones donde se realizan diferentes variantes o modelos.

C – Flexible

La automatización flexible es el tipo de robótica industrial que está articulada en una serie de estaciones conectadas entre sí, pero que funcionan de forma independiente. Eso significa que el ordenador central controla los sistemas automatizados para que estos realicen las tareas de forma ordenada. Es decir, puede producir cambios entre un producto y el siguiente, sin ninguna pérdida de tiempo. 

Ventajas de los robots en la industria

Los robots industriales ofrecen muchas virtudes y posibilidades de automatización. Por ejemplo:

• Aumentan la eficiencia de los procesos productivos.
• Reducen los tiempos de producción.
• Mejoran el aprovechamiento de los materiales y recursos utilizados en la producción.
• Mejoran las condiciones de trabajo y la seguridad de la planta de producción.
• Ofrecen mayor flexibilidad y adaptabilidad.
• Facilitan las tareas de gran precisión y repetitividad.

Nosotros desde Sualver nos especializamos en desarrollar aplicaciones completas a medida a cada planta productiva con diferentes tipos de  robots industriales (que describiremos en un próximo post ) para mejorar su línea productiva y así automatizar sus procesos y tareas. Ya que, hemos podido comprobar en multitud de casos que  la robótica  supone una mejora de  tiempo de trabajo y calidad de algunos productos de grandes fábricas de nuestros clientes ayudado al operario en algunas tareas que son de alto peligro par dejar el trabajo a un brazo mecánico.